Bitcoin vs Bitcoin Cash, ¿cuál es mejor inversión?
[ACTUALIZADO NOVIEMBRE 2022]
Seguro que has oído hablar de Bitcoin Cash. Lo cierto es que corre mucha información por Internet acerca de qué es exactamente y qué tipo de relación guarda con Bitcoin, pero cuidado.
Internet es una fuente de conocimientos de mucho valor en ocasiones, pero también es un canal por el que los bulos se expanden a un ritmo vertiginoso, siendo imposibles de detener una vez se han viralizado.
En la red corren todo tipo de informaciones, inexactas o directamente falsas, acerca de lo que es Bitcoin Cash. Hay que tener cuidado con los bulos, ya que suelen ser publicados a propósito.
Con el fin de esquivar todo tipo de datos falsos y de ambigüedades, hemos decidido hacer un pequeño compendio con todo lo que debes saber acerca de Bitcoin Cash, cuáles son las diferencias con el Bitcoin original y qué perspectivas de futuro tiene.
Y recuerda: nunca te dejes llevar por datos no contrastados ni por las populares cadenas de mensajes que suelen rular por aplicaciones de mensajería instantánea.
Qué es Bitcoin Cash
En Internet, el Bitcoin Cash puede ser lo que tú quieras. Hay noticias para todos los gustos: que si es dinero en efectivo convertido directamente de Bitcoin, una altcoin, una moneda antagonista del BTC, un tipo de dinero fiat derivado del Bitcoin… ¿Entonces?
Las informaciones son confusas a poco que empecemos a indagar en la red, pero algo sí está claro: dada la oposición que presentan los datos entre sí, todo no puede ser cierto. Para saber qué es el Bitcoin Cash exactamente hay que remontarse un poco a la historia del propio Bitcoin, así que vamos a ello.
El origen del Bitcoin Cash está en la masificación, ya que ante el auge desorbitado del Bitcoin hubo un riesgo real de colapso en las transacciones.
Entre 2008 y 2009, la euforia se respiraba en el ambiente. Se había creado Bitcoin, la primera moneda descentralizada que evadía el control de gobiernos y bancos centrales, y que no controlaba absolutamente ninguna entidad.
Una vez creada, la premisa fue simple: mantener la carencia de custodia del activo y dejarla expuesta a los vaivenes de la economía de mercado.
Desde la creación del Bitcoin hasta que su valor alcanzó 1 dólar pasaron casi dos años, una situación que no se parece en nada a la que vive el activo en la actualidad.
Bitcoin es una criptomoneda que contaba desde sus inicios con una capacidad de procesamiento de cuatro transacciones por segundo, una cantidad ínfima si la comparamos con los miles de operaciones que pueden confirmar los criptoactivos actuales en el mismo periodo de tiempo.
Conforme el éxito del Bitcoin se asentaba y su valor iba aumentando, el número de nuevos inversores se mantenía al alza. Sin embargo, la capacidad del Bitcoin para dar salida a las transacciones era la misma, lo que amenazaba la estabilidad de la criptomoneda.
El éxito del Bitcoin pronto dejó al descubierto las costuras del activo. El BTC no daba abasto y las transacciones se acumulaban y demoraban sin remedio.
Durante meses, se produjeron intensas conversaciones sobre cómo dar solución al problema que el éxito del Bitcoin había traído consigo. Tras muchas ideas y especulaciones, la solución estaba clara: crear un fork.
Un fork es un activo derivado de otro anterior. Al proceder de una bifurcación del activo original, es acuñado con el mote “fork”, un coloquialismo que hace referencia a esa característica.
Bitcoin Cash fue una realidad gracias a un grupo de desarrolladores que se separó de Bitcoin y creó Bitcoin Cash.
Aunque en el momento se produjo este cisma la incertidumbre era muy elevada, en parte por la ralentización en la subida del valor del Bitcoin que conllevaba reducir la carga operacional del activo, con el tiempo la creación de forks ha demostrado ser un remedio eficaz para aliviar la presión que las criptomonedas pueden llegar a experimentar durante su periodo de actividad.
El 1 de agosto de 2017 fue cuando Bitcoin Cash fue una realidad. De hecho, era una fecha muy rumoreada y acabó siendo una realidad.
Cada criptomoneda es reflejada por tres letras a modo de abreviatura. Bitcoin mantiene las letras BTC, mientras que Bitcoin Cash ha sido designada como BCH.
Desde entonces, convive el Bitcoin, más consolidada pero mucho más pesada en cuando a operaciones y confirmación de transacciones, y Bitcoin Cash, una altcoin que ha acabado fomentando la expansión del BTC.
Para entender mejor cuáles son las diferencias entre el Bitcoin y el Bitcoin Cash, es necesario analizar el modo en el que se procesan las transacciones, dado que ahí reside la clave del problema del BTC y la solución que trajo consigo el BCH.
Diferencia entre Bitcoin y Bitcoin Cash
El problema del Bitcoin procede a su vez de una de sus fortalezas, ya que su complejo funcionamiento es el que le ha dotado hasta ahora de un alto nivel de independencia.
Eso, y el anonimato que mantiene de todos sus usuarios, han hecho que muchos se vean atraídos por las posibilidades del activo.
Para que las transacciones se realicen hace falta de voluntarios (mineros) que resuelvan los complicados problemas matemáticos que plantea su sistema, a cambio de obtener satoshis.
Veamos: una criptomoneda actúa como un archivo informático que se almacena en un wallet. Esos archivos se pueden transferir, comprar o vender en la red, y todas esas operaciones dejan un rastro.
Las transacciones quedan registradas en una lista que debe ser obligatoriamente pública, pero para que eso pase la operación debe ser zanjada, es decir, ser resuelta por un minero.
Aunque las listas se actualizan con frecuencia, los mineros no pueden recibir más de 1 MB por cada 10 minutos, un mecanismo de defensa para evitar ataques DDoS.
A pesar de que todos estos rasgos estaban hechos para ayudar al Bitcoin a andar el principio del camino, pronto empezaron a salir los hándicaps de las mismas tecnologías que se habían usado para blindar al Bitcoin.
Es así como surgió la necesidad de crear una criptomoneda que mantuviese las ventajas del Bitcoin, pero que presentase una fluidez mucho mayor y fuese un activo más laxo con determinados asuntos.
La clave era crear una criptomoneda que no fuese una emulación del Bitcoin, sino que fuese una nueva versión del propio Bitcoin que, a su vez, no eclipsase al activo original.
El lanzamiento de Bitcoin Cash, que a todos los efectos era una nueva criptomoneda, puso solución de inmediato al problema del procesamiento: el BCH podría procesar hasta 8 MB, es decir, multiplicaba por ocho la capacidad máxima del activo original.
El paso tras el lanzamiento era simple: ofrecer a los inversores intercambiar sus BTCs por una cantidad equivalente en BCH, un movimiento arriesgado que, pese al temor inicial, no desató el caos, como muchos vaticinaban.
La diferencia principal entre el BTC y el BCH es que el primero presenta una capacidad de procesamiento de datos más lenta, mientras que el BCH es mucho más fluido.
No obstante, ambas criptomonedas fueron expuestas a un hardfork (división en dos de una blockchain mediante una actualización obligatoria), que se resolvió con la ampliación de espacio de datos a procesar. Bitcoin actualmente procesa 2 MB, mientras que el BCH puede alcanzar los 32 MB.
¿Qué futuro tiene Bitcoin Cash?
Pocas personas vaticinaban un futuro tan prolífico al Bitcoin Cash. Aunque la moneda madre es la que rige el valor del BCH, no es menos cierto que gracias a esta bifurcación en forma de nueva criptomoneda ha permitido hacer del Bitcoin un activo viable a más largo plazo.
No obstante, el valor del Bitcoin Cash está muy asociado al del BTC. Eso quiere decir que, por norma general, experimentará unas fluctuaciones similares a la del Bitcoin, pese a que nunca puedan equipararse en cuanto a capitalización de mercado.
Invertir en BCH es una buena idea, sobre todo teniendo en cuenta que es un activo que resuelve muchos de los problemas estructurales del Bitcoin original.
El futuro del Bitcoin Cash aún abre muchos debates, y lo cierto es que hay opiniones de todo tipo.
No obstante, es una realidad que esta fork ha puesto solución al principal problema del Bitcoin y que como activo individual es capaz de funcionar, a pesar de hacerlo bajo el paraguas del Bitcoin y depender en gran medida de él.
Por si te lo estás preguntando: sí, invertir en Bitcoin Cash es una buena idea, pese a depender en buena medida del desempeño del Bitcoin en el mercado.
¿Cómo obtener Bitcoin Cash?
Hay dos formas de obtener Bitcoins Cash. La primera es mediante la conversión de activos. Es decir, un poseedor de BTCs que fuese titular de esta criptomoneda antes del 1 de agosto de 2017, fecha en la que tuvo lugar el lanzamiento del BCH, tiene derecho a reclamar la misma cantidad de tokens realizando el cambio a la divisa fork.
Ahora bien, los métodos para realizar esta reclamación varían en buena medida del tipo de billetera que se use y de las opciones que incluyan los monederos, pero la opción es válida para quienes posean BTCs y hayan sido adquiridos antes de la bifurcación.
Hubo problemas con wallets de nodo completo: algunas presentaban incompatibilidades con los BCH y provocaba pérdidas irreversibles de los activos.
El segundo método para obtener Bitcoin Cash es a través de la minería. No obstante, no corren buenos tiempos para ser minero.
A la prohibición de China se está sumando el corte de Internet y subida de precios de la luz en Kazajistán, la negativa rotunda de Kosovo a la minería de criptomonedas y la intención de Rusia y la Unión Europea de poner coto a esta práctica, precisamente por su impacto energético y ambiental.
¿Litecoin o Bitcoin Cash?
Depende de en qué aspecto te quieras fijar. Por ejemplo, en lo relacionado con estabilidad (relativa, como siempre decimos) del criptoactivo y capitalización bursátil, Litecoin se lleva la palma.
Y es que Litecoin es una de las más grandes criptomonedas en este sentido, algo de lo que no puede presumir Bitcoin Cash, que, aunque depende en buena medida del desempeño del BTC, no está replicando sus tendencias alcistas.
Por tanto, resulta algo complicado dar una respuesta clara a esta pregunta. En principio, las características que presentan estos dos activos son lo suficientemente buenas como para recomendar la inversión en ambos activos.
Litecoin cuenta con unos valores más altos de capitalización bursátil, pero el Bitcoin Cash presenta una mayor puntuación de confianza por ser un activo fork de Bitcoin.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce: las forks siempre contarán con el hándicap de crecer al abrigo de una criptomoneda mayor que, normalmente y si todo va según lo previsto, actuará como limitante de la capacidad de la hermana menor.
Esto, por supuesto, a costa de una mayor estabilidad, lo que es una solución a corto plazo para crear un activo seguro, pero limitando su valor de mercado.
Por tanto, dependerá de cada perfil de inversor: si prefieres invertir en un activo con mayor estabilidad, pero menor capacidad de revalorizarse, Bitcoin Cash es la mejor opción. En cambio, si priorizas apostar por un activo más expansionista a pesar de los riesgos que eso conlleva, Litecoin es la mejor opción, por ser, además, una criptomoneda con una elevada capitalización de mercado.




